'El viaje de Copperpot': 25 años después

Resulta curioso cómo la nostalgia está siempre presente en nuestra vida. Vende, y vende mucho. Si Sony hubiese sido medianamente inteligente, hubiera sacado algún tipo de caja conmemorativa por el mejor disco del pop de la primera década de los 2000, pero no lo ha hecho, probablemente porque La Oreja de Van Gogh se encuentra ahora mismo en tierra de nadie: sin cantante y con una Amaia Montero que vuelve, que no vuelve, que está guapísima, que parece un pelele, según las capas y filtros que le haya puesto a su última foto en Instagram.

Este mes de septiembre se han cumplido 25 años de El viaje de Copperpot, el mejor disco de la banda donostiarra. Es un disco que, aunque me causa nostalgia porque lo empecé a escuchar con -yo diría- nueve años y me recuerda toda una época de infancia y adolescencia, lo sigo escuchando porque me sigue gustando mucho. Porque aún continúo descubriendo cosas en él cuando lo escucho.

Y me encanta. Me encanta la sencillez que tienen sus melodías, la inocencia que desprenden sus letras, la poca proyección que tenía la banda cuando lo estaban creando, frente a lo que sería después Lo que te conté mientras te hacías la dormida y el insufrible Guapa. Es un disco al que vuelvo una y otra vez y del que nunca me canso.

Son doce temas, más una oculta que aparece tras cinco minutos de oleaje, de las que no me atrevería a mover ni una coma, no podría mover ninguna canción del lugar que ocupa en el disco, no podría descartar nada. Hace muchos años, encontré en un centro comercial, en una caja de liquidación, el DVD de este álbum con los videoclips, fotos, etc. y descubrí fascinado que uno de los menús tenía de música de fondo una maqueta de La chica del gorro azul. Conocimos también dos maquetas, o más bien descartes, en Más guapa: Nube y Despacio. Pero en las entrevistas de la época hablaban de que habían compuesto 18 o 19 temas para este disco, de los que solo conocemos 13, aunque yo rebajaría esa cifra porque Tic tac ya la tocaron en acústico en 1999, Desde el puerto ya se conocía también en los conciertos de la gira anterior como Tu ausencia y La playa la compuso Xabi Sanmartín en 1996. Aún queda un buen puñado de temas inéditos que no conocemos, que nunca se han filtrado y que yo esperaba que Sony nos preparara en algún tipo de caja conmemorativa por este 25 aniversario. Pero no, no ha habido suerte. Toca seguir esperando. Pero yo sé que ese día llegará.